Las instituciones financieras a lo largo de la nación
americana presentaron desde 2022 más de 500,000 informes de actividad
sospechosa relacionada con el fraude de cheques a FinCEN, la entidad que
investiga delitos como los fraudes con cheques y otros crímenes
Se ha vuelto muy común que hablemos del surgimiento de esquemas de
fraude. Esto ocurre porque los estafadores han sido hábiles y rápidos en
inventarse nuevas formas de engañar a los consumidores.
Los timadores están alertas a lo que está pasando en nuestro entorno
para aprovecharse de la situación, en el momento indicado. Por ejemplo, vemos
timos relacionados al uso de aplicaciones móviles, redes sociales, correos
electrónicos, y hasta con el furor por conseguir taquillas para un concierto.
Además, ha resurgido una modalidad a la que hay que prestarle especial
atención: el fraude de cheques. Específicamente, a través del robo de cheques
enviados por correo postal. Aunque se ha registrado una disminución
significativa en el uso de cheques por parte de los consumidores, el fraude de
cheques ha ido en aumento. En el 2022 las instituciones financieras a lo largo
de la nación americana presentaron más de 500,000 informes de actividad
sospechosa relacionada con el fraude de cheques a FinCEN, lo que representó un
aumento de un 130% en comparación con la cifra del 2020. FinCEN es el negociado
adscrito al Departamento del Tesoro que investiga delitos como este tipo de fraude,
entre otros crímenes.
Si su banco le proporciona imágenes de sus cheques cobrados, es
importante verificar que fue emitido exactamente como usted lo hizo y con la
cantidad correcta, escribe Zoimé Álvarez (suministrada)
El fraude de cheques puede darse de varias formas, pero uno de los
métodos más frecuentes es el robo y lavado de cheques enviados por correo
postal. Bajo este esquema, los estafadores roban cheques en papel enviados por
correo, ya sea “pescándolos” de los buzones del mismo correo postal o
sacándolos del buzón del consumidor. Incluso, se han dado casos en los que los
estafadores asaltan a empleados del servicio postal en busca de cheques. Una
vez estos estafadores tienen en sus manos el cheque, utilizan productos
químicos para “lavar” o borrar la tinta del mismo y alterar la cantidad o
cambiar el nombre del beneficiario. Luego, depositan ese cheque alterado y así
es que perpetúan el robo de dinero de la cuenta bancaria de la víctima.
Ante este panorama, existen varias recomendaciones que los consumidores
pueden considerar para evitar convertirse en víctima del fraude de cheques. Una
primera medida es utilizar otra alternativa de pago, como por ejemplo
transferencia electrónica, pago automático, con tarjeta de débito, pago
electrónico y/o pago móvil, en lugar de cheque en papel.
También es recomendable llevar un balance de su cuenta de cheques,
verificar sus estados bancarios en línea para revisar las copias de sus cheques
y asegurarse de que no hayan sido alterados. Además, se sugiere contactar a los
destinatarios de sus cheques para asegurarse de que los reciben.
Si su banco le proporciona imágenes de sus cheques cobrados, es
importante verificar que fue emitido exactamente como usted lo hizo y con la
cantidad correcta. Otra medida importante es no dejar espacios en blanco en las
líneas del destinatario o del monto de los cheques que escribe. A las
recomendaciones se suma revisar su correo regularmente y no dejar sobres en el
buzón durante la noche. Igualmente, si va a salir de su pueblo o del país, pida
a la oficina de correos que retenga su correspondencia hasta un término
determinado. También puede pedir a una persona de confianza que recoja su
correspondencia mientras se ausenta de su hogar de forma prolongada.
La banca comercial en Puerto Rico utiliza una amplia variedad de medidas
para contrarrestar el fraude de cheques, incluyendo revisiones de depósitos,
herramientas de detección de fraude, políticas de retención, controles de
cajeros y sucursales, entre otras. Sin embargo, es necesario continuar educando
a los ciudadanos sobre el surgimiento de nuevos esquemas y cómo prevenirlo. Es
un asunto fundamental para ayudarle a proteger su información personal y
financiera. Todos podemos detectar el fraude y tratar de evitarlo. Échale
siempre un ojo a tus cheques.